Terapia Niño Adolescente

La terapia para niños y adolescentes que presentan impulsividad, ira descontrolada, TDAH, autismo o problemas de aprendizaje debe ser personalizada, teniendo en cuenta las necesidades individuales y las características específicas de cada caso. 

 

1. Impulsividad e ira descontrolada

Objetivos terapéuticos:

  • Fomentar el autocontrol y la regulación emocional.
  • Identificar y manejar los desencadenantes de la ira.
  • Desarrollar habilidades de comunicación y resolución de conflictos.

Intervenciones:

  1. Terapia cognitivo-conductual (TCC):
    • Enseñar estrategias de reestructuración cognitiva para manejar pensamientos irracionales.
    • Técnicas de respiración y relajación para responder a situaciones de estrés.
  2. Habilidades de regulación emocional:
    • Uso del método STOP (Stop, Think, Observe, Proceed) para reducir la impulsividad.
  3. Psicoeducación para padres:
    • Enseñar manejo conductual positivo y refuerzo de comportamientos adecuados.
  4. Mindfulness:
    • Ejercicios adaptados para niños y adolescentes que fomenten la atención plena.

 

2. TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad)

Objetivos terapéuticos:

  • Mejorar la atención, el control de impulsos y la organización.
  • Aumentar la autoestima y fomentar habilidades sociales.

Intervenciones:

  1. Terapia conductual:
    • Implementación de sistemas de recompensas para reforzar conductas deseadas.
    • Uso de agendas visuales y listas para mejorar la organización.
  2. Entrenamiento en habilidades sociales:
    • Enseñar turnos de conversación y cómo interpretar señales sociales.
  3. Psicoeducación:
    • Informar al niño y a los padres sobre el TDAH para reducir el estigma.
  4. Colaboración con la escuela:
    • Diseñar adaptaciones como descansos cortos, tiempos extendidos o materiales visuales.

 

3. Trastorno del Espectro Autista (TEA)

Objetivos terapéuticos:

  • Promover la comunicación, la interacción social y el aprendizaje funcional.
  • Abordar conductas desafiantes y fomentar habilidades de vida diaria.

Intervenciones:

  1. Análisis Conductual Aplicado (ABA):
    • Usar refuerzos para fomentar habilidades específicas.
  2. Terapia ocupacional:
    • Trabajar habilidades motoras finas y gruesas, así como integración sensorial.
  3. Terapia del lenguaje:
    • Fomentar la comunicación verbal o el uso de sistemas alternativos (PECS, tableros de comunicación).
  4. Terapia basada en el juego:
    • Fomentar la interacción social y la resolución de problemas en un entorno lúdico.
  5. Entrenamiento en habilidades sociales:
    • Adaptado a las necesidades específicas de cada niño.

 

4. Problemas de aprendizaje

Objetivos terapéuticos:

  • Identificar las dificultades específicas y diseñar estrategias para superarlas.
  • Mejorar la motivación y la autoestima.

Intervenciones:

  1. Evaluación y diagnóstico diferencial:
    • Identificar problemas específicos como dislexia, discalculia o disortografía.
  2. Intervención psicopedagógica:
    • Uso de técnicas multisensoriales para facilitar el aprendizaje.
  3. Psicoeducación para padres y docentes:
    • Estrategias de apoyo en casa y en la escuela.
  4. Técnicas de aprendizaje individualizado:
    • Diseñar materiales adaptados y planificar tiempos de aprendizaje flexibles.
  5. Terapia cognitivo-conductual:
    • Trabajar en la motivación, la autorregulación y la superación del miedo al fracaso.

 

Enfoque global para niños y adolescentes:

  1. Psicoeducación familiar:
    • Involucrar a los cuidadores en el proceso terapéutico.
  2. Trabajo interdisciplinario:
    • Colaborar con maestros, terapeutas ocupacionales, logopedas y médicos si es necesario.
  3. Refuerzo positivo:
    • Destacar los logros para fomentar la autoestima y la motivación.
  4. Establecimiento de rutinas:
    • Diseñar horarios y actividades estructuradas para promover estabilidad.

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